El secreto radica en entender el juego

"Inclina tu oído y escucha las palabras de los sabios; aplica tu corazón a mi sabiduría. Es una delicia, si la guardas dentro de ti y la afirmas sobre tus labios" (Proverbios 22:17, 18).

<p>Theodoros Papaloukas nació en Atenas (Grecias) en 1977. Desde pequeño se apasionó por el baloncesto, aunque no parecía promisorio para este deporte: no era el mejor atleta, no saltaba más, ni era más rápido que sus compañeros. Así que fácilmente era superado por los rivales. ¿Cómo podría sobrevivir en la cancha? Un día, se dio cuenta de que el secreto radicaba en entender el juego mejor que los demás. Eso no significaba ser más inteligente, sino aprender a tomar las mejores decisiones. Fue así como el chico empezó a destacar cada vez más y llegó a ser una estrella del baloncesto europeo: dominó el juego como pocos en el CSKA de Messina, en el Olympiacos de Giannakis y en el Maccabi de Blatt y, desde su retiro en 2013, ejerce como embajador de la Euroliga. Sobre su éxito como jugador, Papaloukas dijo: "Todos los deportes de equipo son juegos psicológicos en los que tienes que hacer lo que se te da bien. El baloncesto es pura psicología. Tienes que llevar el partido a tu terreno y esconder tus defectos. Cuando me enfrentaba a jugadores bajos los tenía que llevar cerca del aro, y cuando me ponían jugadores grandes, tenía recursos para penetrar y crear juego para mis compañeros" (<em>El</em> <em>País</em>, 12 de mayo de 2015).</p>

<p>Hay muchas personas que pasan por este mundo sin entender en qué consiste el juego de la vida. Corren como locos det´ras del dinero, los placeres y las posesiones materiales, pero de pronto, al mirar el marcador se dan cuenta de que han sufrido una aplastante derrota. Salomón lo dijo de esta manera: "Volví la mirada, y vi bajo el sol que no son más veloces los que ganan la carrera, ni son los más fuertes los que ganan la guerra; también vi que los sabios no tienen que comer, que quien es inteligente no es necesariamente rico, y que quien tiene conocimientos no siempre es favorecido. Todos ellos tienen su momento y su ocasión" (Eclesiastés 9:11). Hay otros que insisten en concentrarse en sus debilidades para justificar su escasa productividad. Y claro, no faltan aquellos que niegan a esforzarse porque no les encuentran sentido a la vida. Pero Jesús reveló el secreto para aprovechar nuestro paso por este mundo: "Más bien, buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas" (Mateo 6:33, CST).</p>

<p>Decide hoy buscar a Dios.</p>